Wednesday, February 24, 2016

El milagro de la vida

  

    Y el médico, especialista en nefrologia, soltó sin piedad: "en tres meses estarás en diálisis". Me sentenciaba como si fuese el dueño de mi destino. Por su puesto, no le creí. ¿Cómo se puede creer a alguien que de manera irresponsable se refiere acerca de la vida como si se tratara de un juego de béisbol. Estaba obligado a negarla verdad por el modo irresponsable de abordar tan delicado momento de mi existencia. Esa era y es la actitud que corresponde cuando uno no tiene a Dios.
     Pero bueno, luego en casa, con un ¿por qué yo? acepte lo inevitable: estaba muy enfermo. Con el corazón entristecido por la incertidumbre y el cerebro a mil por hora, las preguntas revoloteaban sin cesar de pared a pared y las quejas, innumerables, aumentaban contra Dios, a quien nunca recurrí previamente. Sufría una enfermedad renal crónica terminal. Un tipo de enfermedad incurable, cuya evolución, generalmente, concluye con el fallecimiento de quién la sufre. Lo más extraño es que siendo genética nadie más la ha manifestado en mi entorno familiar. En todo caso pudiera ser no recurrente. Que así sea. 
     La tribulación fue grande y no tenía otra opción: luchar con lo que estaba a mi alcance. Hice dietas, aprendí a ser vegetariano y practique tai chi; de poco sirvieron estas estrategias para superar tan penoso momento. Sin embargo no fueron tres meses; transcurrieron seis años antes de recibir la primera sesión de diálisis en los cuatro años, seis meses y treces días de esfuerzos y lucha continua. En mi brazo izquierdo permanecerán por siempre las huellas de aquella amarga experiencia; ellas me recuerdan cuan cuidadoso debo ser con mi salud y con mi vida. 
    Con la gracia de Dios pude alargar los días sin el tratamiento mecánico o de homodialisis. Si. Una maquina hace el desempeño de los riñones. Ciertamente es la única manera de sobrevivir; aunque la calidad de vida se va apagando progresivamente y, en muchos casos, la propia diálisis consume los músculos, la energía y la vida. Es la única manera de permanecer vivo. Un callejón sin salida. Pero, ¿había otra salida? No. 
     Acepté mi realidad. No fue fácil ver los fluidos sanguíneos salir de las arterias, que pasaran por mangueras o arterias artificiales, recorrer un filtro, entre otros detalles, y regresar a tu cuerpo débil y quebrantado. Fueron días grises pues andaba entre la vida y la muerte. Dolío ver cómo se iba la vida a mi alrededor y como la muerte me amenazaba día tras día. Sobrevivir era mi prioridad. Sé que perdí muchas experiencias familiares y sociales. Fue inevitable, pero Dios me dio cualidades muy significativas. Siempre confié en él, le supliqué a cada instante por un riñón y fue bueno conmigo. Qué más puedo decir. No fue el hombre quien me saco de allá pues miles enfermos renales mueren esperando por el remplazo. Pero, no todo fue desagradable. En ese periodo Dios, con su gracia, me otorgó cualidades y me enseñó más de lo que aprendí durante todos mis años de vivencias y estudios. Aprendí, también, que nadie tiene el control de la vida. Solo Dios lo sabe y puede hacer su propósito en ti cuando él lo decida. 
     En aquel entonces, el sistema de transplante de órganos era eficiente, si lo comparamos con el actual. Así que una llamada, aquel viernes lluvioso, cambiaría mis expectativas. "Mira Beltran, te estoy llamando desde hace horas". Dijo mi primo Mario Brito (+). "Debes estar en Caracas a las dos de la tarde". Fue el 24 de febrero del año 2006. Estaba seguro que todo saldría bien, pero habían obstáculos menores que superar: los nervios, el móvil sin batería, el viaducto en escombros, no habían taxis en Maiquetia, solo pocos mototaxistas. "Chamo, puedes llevarme al Hospital Militar"; le dije a uno que estaba por ahí. "Tranquilo, no hay problema", me respondió". "Cuánto es"; "Treinta bolívares". Le pagué cuarenta. El tránsito era pesado por la cola de la carretera vieja de Caracas-La Guaira, única vía hacia el litoral capitalino. Me aferraba a la vida. Inolvidable, no lo creía. El día esperado. Dios tú lo hiciste. 
     La operación se iniciaría alrdedor de las once de la noche y terminaría después de 01 am del día 25, sábado de carnaval. Que recuerdo. En el pasillo anterior al quirófano temblaba a causa del frío o de los nervios; todavía no estoy seguro. Oí, a lo lejos, a los médicos hablar: "es un paciente varón de 45 años y tiene riñones poliquisticos". No capte otra información pues me concentraba en orar a Dios. Había en mí una confianza rara, esa que supera todo entendimiento (Fi 4:7) La vida me sonreiría de nuevo. Mis sueños se harían realidad. El milagro de vivir está en mi por la gracia de Dios.
    Hoy 25 de febrero cumplo año de nuevo. Hacen diez años nací otra vez. Mi riñón injertado tiene los primeros 10 años y no saben ustedes lo grande que es regresar de allá, ni se imaginan cuánto valoro a la vida y cada momento que ella me da. Parece que fue ayer cuando regresaba de diálisis a casa sin fuerzas pero con vida. Eso pasó y aunque físicamente aparento fragilidad, no lo estoy, porque más fuerte es el que está en mi. Y si no adquiero peso ni músculos, aunque consuma grandes proporciones de carbohidratos y proteínas, estoy sano y fuerte. Lo necesario para caminar, reflexionar, escribir y leer.
     Mi vida giró. Dios puso el milagro de la vida en mi cuando decidió darme otra oportunidad. Ahora mismo nada es igual que antes. Soy otro. Valoro lo que deje ir, pero pensándolo bien nada perdí porque todavía está. Ahora sé hacia dónde voy y que todo cuanto hago tiene un propósito y fin. Hoy solicitó a Dios, mi gran confidente, que continúe guiando mis pasos y le agradezco, a cada amanecer, por el milagro de vida y el placer de permitirme transmitir el valor de su Palabra, porque a fin de cuentas conocer a Dios es una tarea impostergable para mí, pues ignorar el conocimiento de Dios es como andar a ciegas, tanteando con un bastón en la oscuridad. 

Aunque no lo creas, Dios está contigo y no te desampara ni un solo instante; pues él está vivo y te oye; así que cuéntale todas tus necesidades, espera confiado (a) y ten paciencia que toda prueba tiene su gran recompensa.


#VenezuelaBrillara

Sunday, January 24, 2016

Renovaos vuestro entendimiento o morid

     Interpretando referencias que nutran la idea de formar ciudadanos encontramos en la Biblia, el libro de la Fe cristiana, una agradable sorpresa. Allí Pablo nos dice: "no os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cual sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta"; Romanos 12:2, RV1960. Esta singular cita, ubicada probablemente entre los años 50 y 60 d.C, presenta al apóstol Pablo quien, ungido por el Espíritu Santo, escribe la carta "a sus queridos hermanos de la iglesia de Roma" (1.1). Saulo, un judio de origen y creencia, quien previamente perseguía y asolaba a los cristianos, pero luego es converso y transformado en Paulo, es el apóstol a cual Dios utiliza para aconsejar a los primeros cristianos de Roma, sobre lo que deberían hacer para identificar la buena voluntad de Dios.
     Este versículo denota una profundidad filosófica y profética que sobrepasa el entendimiento de los pensadores y eruditos posteriores, quienes, por lo general, desechan la Palabra de Dios por orgullo, arrogancia y prepotencia, ignorando la verdad indiscutible que es Dios. De esta manera, el mundo prefiere orientarse bajo el criterio del hombre y; es así como los centros de formación académica, - escuelas, liceos y universidades-, desatienden los fines supremos demandados por la humanidad y que, Dios con su misericordia nos ofrece por medio de Pablo.
     Con el propósito de comprender este versículo necesario es, en primer lugar, admitir que el sustantivo conformarse traduce aceptar o adaptarse a algo. Pues bien, conformarse es, en esencia, la actitud de permanecer o vivir atado a un modelo o paradigma de entendimiento e interpretación inmutable, único, inalterable y sin posibilidades de cambio; de modo que conformarse es perder la oportunidad de avanzar, expandir conocimientos y saberes, para así allanar el camino y ser auténticos ciudadanos, no simples habitantes del mundo. En el caso de las personas apáticas, indiferentes y resignadas con lo aprendido es imposible renovarse y transformarse a sí mismas y menos esquivar las trampas a las que son expuestas diariamente; conformarse es quedarse estacionado sin posibilidades de dilucidar o diferenciar entre lo correcto e incorrecto. 
     Permanecer con lo aprendido es estancarse y lo estancado se descompone, se hace impropio. Es rendirse, abandonarse y dejar que el tiempo y los elementos transcurran impidiendo descifrar y comprender la naturaleza de los fenómenos sociales, comunicacionales, tecnológicos, políticos y económicos y, más allá, es la incapacidad para reconocer lo maligno que está en la moda, la publicidad, los placeres, la belleza, la estética, la simpatía, el carisma, la popularidad, los derechos, las artes y la riqueza, por ejemplo. Quienes no se renuevan están condenándose a ser la cola y nunca el eje transformador de una sociedad pues son como las hojas secas, que luego de caídas y reposadas, son arrastradas según la fuerza y la dirección de la brisa; no tienen el poder para desplazarse por sí solas; están condenadas a ser objetos y nunca sujetos del movimiento que innova. Estar satisfechos con lo que se sabe es cerrar la puerta a la innovación, es aceptar a vivir en el pecado, el error, el atraso, la manipulación y el control, origen de la pobreza, el populismo, la demagogia y la muerte.
     En opuesto, el sustantivo renovación significa actualizar e innovar y; dado que se trata del entendimiento, se asume como una cualidad de las personas que permite, por medio de la interpretación y la comprensión, probar, comprobar y ratificar la buena voluntad de Dios. En otras palabras, Dios nos dice que, con la renovación del entendimiento es posible identificar aquellas cosas que nos perjudican y las que nos favorecen; permitiéndonos seleccionar el camino correcto. Así que nos invita a mostrar una actitud transformadora, dinámica y nunca pasiva e indiferente ante la vida y el entorno. Renovarse significa mantener una actitud que se inicia en la interpretación de los fenómenos desarrollados, apertura el entendimiento de las diferentes aristas que conducen a comprender la naturaleza de los eventos, para que luego, evaluemos, valoremos y la decidamos de la manera correcta. En extracto, es renovar el entendimiento, caminar con inteligencia y audacia en la vida, actualizar el conocimiento y los saberes, lo que en definitiva, ayuda a ser más eficientes, efectivos y eficaces. De este modo es posible ofrecer respuestas pertinentes a las exigencias, pero sobre todo, vivir bajo los estatutos que Dios nos ha dado.
     Nadie, consciente de esta verdad, negará la importancia de innovar, expandir conocimientos, los saberes y la propia inteligencia, pues renovar el entendimiento es ser inteligente y la inteligencia no viene solo de comprender sino, más bien, de renovar la comprensión a fin de que podamos entender el por qué, las causas y las consecuencias de los eventos o cosas, tanto de las que nos convienen, como de las que nos perjudican. Dios por medio del Espíritu Santo usa a Pablo y nos deja este versículo en el cual nos invita a sustituir continuamente los saberes y el entendimiento, para que así podamos dilucidar entre lo apropiado e inapropiado. 
     El ser humano posee capacidades biológicas, psicológicas e intelectuales para seguir aprendiendo por medio del libre albedrío y de la inquietud propia que produce el ser cognonscente, entonces profundiza sus razonamientos, logra la comprensión y el entendimiento de los eventos; en consecuencia, aprender, innovar, inventar y avanzar le es natural. El ser humano obediente sabe que toda innovación no es buena por sí sola, pero eso debe estar preparado para comprobar e identificar la buena voluntad de Dios, que siempre es agradable y perfecta, pues Dios no quiere que seamos engañados, ni utilizados y menos controlados por el hombre. En este sentido, Dios nos ha provisto de cualidades específicas para que identifiquemos lo que nos perjudica y decidamos cómo actuar adecuadamente. 
      El desconocimiento de la palabra de Dios ha llevado a la educación de Venezuela, como al resto del mundo, a enfocarse, casi en exclusivo, a preparar para el trabajo, la producción, la ganancia, el resultado rentístico, en síntesis, para la acumulación de riquezas monetarias o materiales. Hasta ahora las carreras, -exceptuando la docencia- están de alguna manera dirigidas a obtener provecho, al intercambio comercial, bajo la premisa de que el capital es lo que mueve al mundo y es el origen de la felicidad. En base a este esquema son válidas las artimañas que hacen posible el éxito individual o colectivo, de un lado quedaron rezagados otras metas. Aquí, entonces, no tiene sentido enseñar la solidaridad entre ricos y pobres, el respeto a la vida, la cortesía, la amabilidad y la decencia entre las personas, por ejemplo. Estas cualidades no tienen importancia, al contrario, son obstáculos a los fines anteriores o, en el mejor de los casos, son simples instrumentos para lograr beneficios materiales y no para establecer la armonía, la paz o la convivencia. Estas no tienen el menor significado. No interesan. Y, ¿qué podríamos de decir de la honestidad, el servicio, la compasión, la inclusión y la participación? Ante la opinión mundial ha quedado suficientemente comprobado la ausencia de la práctica de estos valores; debido a que la educación no es el eje transformador y renovador del entendimiento. Por ello el mundo está a la deriva o en la ruta que el enemigo planificó, donde lo malo es normal y hasta bueno o aceptado, todo ello debido a que Adán abrió en el Edén cuando confiado de sí mismo, desobedeció al Rey de Reyes, al Señor de señores.

Señor, haz tu reino aquí en la tierra como en el cielo.
Dios bendiga a Venezuela 

Sunday, December 27, 2015

¿Ladrillos nuevos o viejos?

    No creo que estemos preparados para el cambio ético. Ello requiere un mayor esfuerzo y tiempo. Probablemente mayor sufrimiento y penas, entonces las necesidades obligarán a establecer pensamientos, decisiones y acciones acordes con las necesidades de mejorar. Pero, por ahora no se vislumbra ese cambio esperado.
    Muy lamentablemente, políticos, intelectuales y hasta humoristas están casados con la idea de iniciar la construcción de este nuevo edificio, que es Venezuela, con materiales viejos y usados, que cumplieron su tarea, y es más, ya no están para las batallas que la ética exige. Necesitamos materiales nuevos, resistentes, capaces de superar las exigencias que se avecinan. No será fácil, pero podríamos confiar en lo nuevo, lo viejo que fue probado no tiene nada que probar. No tiene resistencia ética, para qué utilizarlo nuevamente? Es increíble que se quiera construir con lo usado o con parte del edificio derrumbado.
   Venezuela ha sido un país de gente noble e incauta, por no decir, ignorante, aunque esta es la connotación apropiada, duele aceptarlo. Sin embargo, este no es el fin del mundo. Todos los paises desarrollados pasaron por esto. En nuestro caso, no será diferente la lucha contra la ignorancia política. Aprenderemos y superaremos esta realidad. Estamos en eso, pero vamos a aligerar las cargas. No pongamos más engaños sobre las mayorías, hagamos el sacrificio que tengamos que hacer, pero no más engaño, traiciones y manipulaciones. A los diputados electos les sugiero, una vez más, que dejen las ambiciones a un lado. Venezuela, toda, es lo más importante. Nada supera el amor por un pueblo traicionado una y otra vez. Si Venezuela no les duele, no harán los sacrificios.
     Diputados electos, que la lectura del 6D no les engañe. El pueblo voto para salir de esta delincuencial red. No planeen repetir la cuarta república, la cual se conoce con aquella frase irresponsable "cuando éramos felices y no lo sabíamos". No. No éramos felices pues de allí vino este presente, o no quieren recordar todo lo que en esta etapa paso? Pues, había corrupción, un presidente regalaba dinero a otros países, parecido, verdad, una amante gobernaba, un ministro llamaba menudencia a 99 jeeps mal adjudicados, un chino pago los platos rotos de RECADI, los ambiciosos Caldera y Pérez repitieron más por por la terquedad y egoísmo que por méritos. En fin, hay más historias que contar, suficiente como para desechar la intención de regresar a ese modelo nefasto.
   Señores, no crean que votaron por un plan político específico. Ahora mismo, no hay partido político que les entusiasme. En el fondo desean ver resultados: salarios dignos, alimentos, seguridad ciudadana, medicinas, empleos servicios públicos eficientes, etc. No hay más cheques en blanco para partido político alguno. No van a confiar en ustedes así de fácil. Por todo esa verdad, vamos a construir nuestro edificio con materiales sólidos, que sean inquebrantable a la ruindad, que es la trampa y la corrupción. Construyamos al mejor país con el mejor material posible. Basta de pícaros. Venezuela se merce lo mejor.
  El mejor regalo que podrían hacerle a Venezuela es redactar y firmar un documento por los Principios de la Refundación de Venezuela. Allí se deberá establecer un compromiso, no sólo sobre el documento, sino también en el corazón de cada uno de ustedes, para llevar adelante los sueños de hacer grande esta bella nación. 

Feliz 2016
#VenezuelaBrillara
#VenezuelaSeraGrandeEntreLasNaciones

Si tan solo aceptarán a Dios en sus corazones, la lucha sería menos traumática. Dios bendice a Venezuela 

Tuesday, December 22, 2015

Cambio ¿Aceptamos el desafío?

     Los efectos de las elecciones del pasado 6D se hacen sentir. No ha sido cualquier cosa lo que ha sucedido. El régimen no esperaba este desaire o rechazo y la oposición no suponía este apoyo y más allá, pareciera no comprender el desafío que tiene ante sí: el cambio. Si, son tiempos de cambios. Ese es el mandato del pueblo. Ahora bien, ¿Administraran el sentimiento y deseo de las mayorías?
     Sin duda que, estas elecciones tienen un significado especial en la historia política de Venezuela y probablemente para Latinoamérica; pues estamos en presencia del final de una etapa y el inicio de otra, marcada por la madurez cultural, como sociedad democrática de Venezuela. Se dice fácil. Pero sí, es el trajinar de la transición desde la condición de habitante hacia la condición de ciudadano. Los venezolanos lo estamos viviendo.
    La lectura de los resultados tiene varias aristas, pero es la designación del presidente de la Asamblea Naciona donde todavía se percibe álgidez de la cruda realidad venezolana: los actores políticos deben asumir el compromiso del cambio, que desde nuestra óptica, significa modificar, transformar e innovar para dejar de hacer algo de una manera poco o nada conveniente por otra que, en todo caso, debe y ha de ser mejor. El cambio se traduce en la manera de optimizar el funcionamiento de una acción, un proceso, una organización o, en nuestro caso, un país. Pues bien, el análisis simple es que la gente votó por el cambio. Ello es lo que humanamente hacen los habitantes cada vez que van a eleciones. 
    Sin embargo, para que se desarrollen los cambios demandados en Venezuela es necesario la existencia de un cambio interno, en el ser; en otras palabras, en los valores y de allí en las acciones, el caso que nos ocupa, en los diputados electos. Primero, en los valores porque estos conducen a pensamientos y planeamientos convenientes al país todo; luego en las acciones pues éstas demostrarán que el amor si reside o está en el corazón y los frutos del amor son: compasión y honestidad, por nombrar dos principios fundamentales. Si ello no fuere así, el cacareado cambio será otra frustración.
     Ante esta nueva realidad, es propicio preguntarse: ¿están los diputados electos dispuestos a cambiar? ¿reconocen la necesidad de cambiar a lo interno? ¿Reconocen que los errores vienen del pasado y no sólo del presente? ¿Están dispuestos a pedir perdón o no se sienten responsables? ¿Están dispuestos a cambiar la forma de hacer política? ¿Seguirán manipulando, engañando y burlándose de las mayorías? ¿Qué señal se envía a las mayorías si se escoge a un representante del pasado? ¿No está preparada la nueva generación, para llevar adelante el desafío de transformar o bien, son los experimentados, los pícaros y hasta cómplices de corruptelas de la denominada cuarta república las personas adecuadas para este demandado cambio? Si las cosas fueren decidida por tal experiencia, Venezuela no tendrá escapatoria. Estaría condenada al fracaso. Pobre Venezuela.
     Diputados experimentados, y jóvenes también, Venezuela pide a gritos un cambio ético. Basta que el carisma o la palabra fácil sean las únicas semblanzas para elegir a líderes. Necesario es que haya espacio para el ejercicio de la eticidad ciudadana donde la honestidad y el amor sea manifestado, lejos de la hipocresía, en el servicio público. Modelen la ciudadanía con sus acciones, lenguaje, gestos y opiniones pues la avaricia, el odio, la picardía y la triquiñuela se ve en sus rostros y es asimilado con el fin.
    Hay espacio para triunfar, pero también para equivocarse, pero equivocarse no nos conviene. Confiemos en que miedo al fracaso no permita que el origen de este presente nos guíe. No es hora de fallar. Llego la hora de triunfar. Brinden la oportunidad, a toda Venezuela, de lograr la convivencia y el progreso esperado.

Ámense unos a los otros con amor fraternal, respetándose y honrándose mutuamente. Romanos 12:10
Si tan solo habitara en el corazón de cada uno de nosotros el amor por el prójimo, otra cosa sería de Venezuela.

#VenezuelaBrillara
#DiosEstaConVenezuela

Wednesday, December 16, 2015

Recados para la nueva Asamblea Nacional

     El comportamiento del pueblo venezolano luego de la avasallante victoria sobre el régimen pro cubano ha sido único, ejemplarizante. Es inocultable la esperanza. Hoy los rostros de miles de venezolanos muestran la alegría por un mañana mejor. Además, y después de todo, suponen que el régimen ha entrado en etapa terminal y agónica, caracterizada por la implosion política no sólo tras el fracaso electoral -que se entienda bien-, sino además por el derrumbe de la nefasta estrategia de manipulación, engaño y control, denominada "guerra económica". Ciertamente, nadie en su sano juicio se cree tal patraña, surgida de las mentes más retorcidas que hayan gobernado a Venezuela.
    Sin duda alguna, continuarán con el mismo discurso y alguna otra acción por acá o por allá sin éxito y para consuelo de millones de venezolanos se hundirán con cada palabra, frase y qué decir de las acciones. Sin querer promoverán la progresiva desaparición del Partido Socialista Unido de Venezuela, lo cual finalmente beneficia al hacer político del país pues el comunismo no tiene espacio en nuestra sociedad. Que la alegría colme las calles y las plazas de toda Venezuela, pero que también sirva para que los actores políticos revisen detenidamente la altísima responsabilidad que tienen frente a sí.
     El pueblo castigó. Dio rienda suelta a la mayor paliza electoral de estos últimos años. La gente repudia este presente. Saben que no se merecen las colas y las humillaciones. El venezolano común no es tan tonto como creían los antillanos. Nada que ver. Se equivocaron. Hemos demostrado de qué estamos constituidos: aborrecemos la esclavitud. Despertamos y dimos el ejemplo que ellos no esperaban. Amigos vecinos vean el ejemplo que Venezuela ha dado y recuerden que esto es solo el comienzo. Casi nada se ha logrado y desde ya declaró, en el nombre de Jesuscristo, que Venezuela brillara. Nada impedira que el funcionamiento democrático sea corregido y Venezuela inicie el camino hacia el éxito y la prosperidad que se merece. Los errores, que tanto nos han costado, también  nos han enseñado que debemos evitar la repetición de los mismo.
    El hacer político que tanto nos aturde, hoy ocupa una parte significativa de las conversaciones cotidianas; es el tema de conversación para infantes, jóvenes, adultos y hasta adultos mayores. La Victoria es el tema. Nadie deja de comentar y opinar. Es que la experiencia y la cultura democrática vinieron a quedarse en Venezuela, para alumbrar como luciérnaga en la oscuridad. La gente común está haciendo comentarios interesantes. Ahora analizan, interpretan, comparan y opinan con coherencia y cierta madurez, en pocas palabras, han aprendido de manera rápida y sorprendente. No es para menos.
    El análisis simple es que votaron para repudiar lo que estaban viviendo en carne propia. Era imposible acompañar a un régimen que solo desea perpetrarse en el poder con el engaño. También reconocen que dejan en la nueva asamblea la confianza de rescatar la democracia, pero no sólo la democracia, en el fondo desean paz y progreso. En este respecto, recomiendo a los diputados electos que esto es solo el comienzo. No crean que tienen al "toro agarrado por los cachos". No amigos. Ahora es cuando viene el pueblo a exigir y protagonizar, algo que nunca han logrado. Ustedes deben modelar lo que nunca han modelado. Ustedes serán puestos a prueba. Su ética se mostrará en sus pensamientos, decisiones y acciones. No será fácil, muchos abandonaran y otros serán repudiados. Esto no es un simple regreso al bipartidismo. Nada de eso. A los diputados, unos cuantos con experiencia y casi con prontuario por ser cómplices de corruptelas en la denominada cuarta república se les recuerda que dejen atrás las triquiñuelas, que lo que hicieron en el pasado es aborrecido pues lo que quiere es lo contrario. Los ojos de millones de venezolanos están sobre ustedes. Y lo más importante, Dios está pendiente y les graba desde todos los ángulos. Pilas Venezuela.

#VenezuelaSeraGrande
#VenezuelaBrillara
#DiosEstaConNosotros


Tuesday, December 15, 2015

Ciudadanos virtuosos : La MUD es el instrumento. No el fin.

Ciudadanos virtuosos : La MUD es el instrumento. No el fin.:       El 6 de diciembre ha sido un día glorioso para Venezuela; el país que tanto amamos y por el cual las angustias abundan, pero que, por...

Thursday, December 10, 2015

La MUD es el instrumento. No el fin.

      El 6 de diciembre ha sido un día glorioso para Venezuela; el país que tanto amamos y por el cual las angustias abundan, pero que, por sobre todas las cosas, nos ha dado la alegría de saber que si podemos unirnos para construir y hacer de él el mejor país posible. Ha demostrado la motivación y el potencial humano para salir adelante y triunfar. La estirpe libertaria se ha hecho presente; claro falta concretar planes y proyectos sustentados en el ser humano y no en las riquezas materiales. Somos los seres humanos los que transformamos y damos valor a las cosas.
     Sin embargo, y en honor a la verdad, el problema no sido resuelto pues Venezuela va a crecer y será grande y esplendorosa. Ello tomará su tiempo. Apenas se inicia un proceso de construcción que será torpedeado desde afuera, como desde adentro. Todo lo cual es normal si tomamos en cuenta que la praxis política está repleta de ejemplos de bajezas, sobre todo en Venezuela o ¿por qué hemos llegado hasta aquí? En este respecto, es oportuno hacer un llamado para elevar el compromiso ético de los diputados -en lo personal mantengo un frecuente escepticismo, producto de la experiencia y del perfil de muchos de los diputados seleccionados. 
    Señores, Venezuela demanda mayor el compromiso ético posible. No es tiempo de trampas, para que ello sea cierto necesitamos dignos representantes de lo ético. La tarea es inmensa. Muchos de los "héroes de ahora" serán arrastrados hacia afuera por la inercia ética implícita en los resultados del 6 de diciembre y de lo que se avecina. Esto es el comienzo de lo excelso. Basta de perversion. De modo que esta alegría no se convierta en una simple celebración. Se viene una etapa de alta investidura, donde los actores políticos están obligados a ser modelo de integridad ciudadana. Lo veremos.
      Felicito al pueblo venezolano. No ha sido fácil llegar hasta aquí. La victoria se la dio el pueblo a sí mismo. Seamos claros. Los votos son el simple reflejo del castigo al peor ejercicio administrativo en toda la historia republicana de Venezuela. La gente está agobiada de las colas, la escasez, la inflación, la inseguridad y de ver cómo la pobreza los hunde día a día. Así que, no hizo falta protagonismos, ni ofertas engañosas por parte de la oposición. Simplemente llegó la hora de poner en su lugar a un partido político signado por la ignominia y la maldad. En consecuencia, no crean los miembros u organizadores de la Mesa de la Unidad que son los héroes. Algo si aprendió la MUD: a evitar la trampa. 
   La avalancha de votos ha sido la válvula de escape que abre la oportunidad para grandes transformaciones. En nada se traduce en un regreso al pasado. Hoy, sin temor a dudas, podemos asegurar que la Mesa de la Unidad Democrática lo hizo bien, pero los propios chavistas y la oposición lo hicieron mejor: votaron por él cambio, por la transformación. En este sentido, es idóneo reconocer que la Mesa de la Unidad Democratica ha sido la vía, pero no es la solución y menos el fin. Solo ha sido el instrumento para llegar hasta acá. 
       Los héroes de estos resultados es el pueblo y la gente; cargaron en hombros a la MUD. Fue el pueblo, cansado de tanto hedor, quien decidió votar por el cambio, un cambio que ha de ser etico. Que no venga nadie en busca de protagonismo calculado. No se engañen los actores políticos pues la gente está aprendiendo muy rápido. No sea que queden en ridículo cada vez que desean aprovecharse de las necesidades del las mayorías. 

Dios quiere lo mejor para Venezuela, pero lo mejor es que reconozcamos a Dios como nuestro guía. En la Palabra todo está.

#VenezuelaSeraGrande
#VenezuelaBrillara