Los últimos acontecimientos que se están desarrollando en Venezuela,
Latinoamérica y en el mundo revelan la necesidad de transformación del ser
humano. No es banalidad pensar sobre ello, al contrario, es una responsabilidad
de todos, y con ello se incluyen todos los agentes que constituyen el
moldeamiento de la condición humana que es, en esencia, la matriz de todo lo
que pensamos y hacemos.
Sin duda alguna, los tiempos siempre han puesto en evidencia las
bajezas de la denominada especie humana, que de lo humano tiene mucho que aprender
y exhibir, porque diariamente se observa su decadencia rancia y
pura, donde se destaca lo ignominiosos que es el ser humano cuando el poder es
el fin. En efecto, el poder alucina y desequilibra hasta alcanzar niveles de ambición
escalofriantes que afectan la vida, lo más importante.
Es, siempre, el poder uno de los temas que más aturden. Tanto que,
por lo general, representa el punto más álgido de toda la existencia de una
persona ambiciosa que decida lograr el poder, la autoridad. Probablemente
porque, entre otras cosas, significa el logro de todo lo demás. Agregue o
piense usted lo que quiera, pues con el poder sería fácil todo eso que pasa por
su mente ahora mismo, advierto que estas abstracciones pudieran ser compasivas o
siniestras, pero como siempre el lograr y conservar el poder trastoca y pervierte,
entonces y por lo general, se producen infamias que la historia guarda para, no
solo ejemplificar, sino para mostrar lo crueles que suele ser el ser humano cuando el poder es el fin. Pues si, el poder es el motor que ha impulsado tácticas malvadas
y hasta impensables. Solo por la necesidad de alcanzar y mantener el poder se
han producido miles de asesinatos, desapariciones, torturas inimaginables, violaciones
de distintas índoles, guerras, invasiones; Etc.
En este sentido, y para ejemplificar lo ignominioso que llega
ser el ser humano, se destaca un caso insigne que seguramente quedara inscrito
en las crónicas de la historia política y económica mundial. Con ello se demostrará
lo que no se debe hacer cuando los fines son: la justicia,
el estado de bienestar y progreso social común, la autonomía, la convivencia social y el hecho democrático,
entre otros fines que humanamente denomino Realizaciones Superiores, las cuales los seres
humanos deberán cumplir como muestra del avance espiritual que debe lograr y conservar.
Pero claro, como los planes no son tan humanos, entonces suceden
hechos repudiables que llaman la atención del mundo político internacional y
producen una actitud, no solo critica, sino más bien constructiva, que es lo
que vale y con la cual ustedes pueden compartir o disentir. El sujeto de atención
y que representa lo discurrido es uso que se le ha dado a Petróleos de
Venezuela; la empresa que maneja la exploración, producción, comercialización
de los inmensos recursos que están en el subsuelo de Venezuela y que tanto
entusiasma al regimen. En esencia, Petróleos de Venezuela representa para el gobierno la palanca con la cual impondrá el estado comunal. Es la oportunidad monumental,
pues la inmensa reserva de crudos pesados y extra pesados y la exorbitante o
alucinante proporción de miles de millones de dólares significa todo y con ella
ya se han aplicado todo tipo de medidas orientadas hacia ese fin.
Esta visión sobre el gobierno y el uso de Petróleo de Venezuela Sociedad
Anónima no surge de modo arbitrario o como un hecho cotidiano, tal cual lo anuncia
el refranero popular que nos dice “piensa mal y acertara”. No, ello viene de la
observación meticulosa y es una realidad que esta ante los ojos de todos, que
usted no lo quiera ver es otra cosa. Por ello a la luz de la ignorancia, de la apreciación
del: "no pasa, no seas mal pensado y todo seguirá igual", el comunismo o
totalitarismo va a pasos firme. Que quede claro, el fin es establecer esta idea
en toda Latinoamérica.
La perversidad a la cual se refiere esta reflexión queda
demostrada cuando se han donado más de 80 mil millones de dólares a países vecinos,
mientras la inflación en Venezuela no ha sido controlada -ello sería
improcedente, los presupuestos para la educación y sanidad son deficitarios, las
expropiaciones tienen la misión de limitar la producción económica, así nutren
de modo artificial la lucha de clases y se genera escasez de productos
alimentarios que procuran acostumbrar al racionamiento, la Misión Robinson se
propone limitar el conocimiento y adoctrinar o formar el ciudadano comunitario con
miras, ya no a la imposición comunista, sino a la conservación de éste, la
delincuencia es una manera de controlar e intimidar, que la justicia es ciega
ante la corrupción pues ese no es fin, el fin es otro y por tanto no conviene, la justicia existe
para imponer el imperio del terror, como prueba el fallecimiento de
Franklin Brito y la condena de Simonovich.
Este espacio que nos brinda la tecnología es chico
para detallar todos los desmanes del régimen; así que con la ayuda de la
audacia personal de cada lector se podrían destacar las inmoralidades o
animalidad del ser humano, en este caso representada por la Revolución Bolivariana. Por ello los invito a detallar de modo particualar, familiar, o laboral todas las perveersidades perpetradas hasta ahora.
Ah y respecto a la devaluación de la moneda? qué creen? sera un hecho fortuito?
"La ruindad que produce la ambición por el poder solo se acaba
cuando se ataja…"
por ello
"Seguimos soñando con la mejor educación para el mejor país posible"